Soy un
velero a la deriva
en un
océano sereno y azul,
me
cubre un cielo con nubes de tul
y el
sol me recuerda que estoy viva.
Náufraga
dolida de varias tormentas
convirtió
la piel en sal y roca
sin
timón las tristes almas,
muertos
los ojos, seca la boca.
Carga
el velero un corazón
buscará
una escollera ,
su
orilla cimbreante, ilusión
de
espejismo, no tendrá.
Mar,
océanos y soledad
la
muerte de poemas
palomas
sin alas
ahogados
gritos de verdad.
Cruel
el viento azotó las velas
desnuda
el alma se despliega,
bautizada
por las olas
así,
desnuda y ciega se entrega,
perdida
en un abismo.
Un
velero perdido
acompañado
sólo por gaviotas,
buscando
las migajas
de
versos
alimentando
su
dolor.
Alicia
M. Moreno
19/02/2013
Derechos
Reservados
No hay comentarios.:
Publicar un comentario