A Alicia, aquel cielo azul
Aquel cielo azul
No me interesa la gran ciudad
que se ufana de sus estatuas
o presume de ceremonias fatuas
prefiero mis mentiras a su verdad
Decidme, donde vivió el
inconsolable poeta
Decidme, si murió olvidado de pena
o si hubo un traidor en su última cena
decidme, quien alimentó a ese buen asceta
Aquel poeta como todos
jugó, vivió, amó y sufrió
y al irse vio el azul de su niñez
Despreció los mármoles por los lodos
de buena fe a los hombres sonrió
y murió recordando su cielo por última vez.
Miguel Cano
Derechos Reservados
10/04/2014
Dolor causa mentirse a si mismo
más la verdad nadie la tiene,
hoy el mundo vive un cataclismo,
donde la mentira a muchos conviene.
Ese poeta nació con luz
celestial,
alimentando de fe su alma,
más con su palabra nos dio calma,
dando su amor, cual manantial,
de aguas cristalinas a quien lo ama.
Sólo sabrá el poeta ver ese cielo
cuando su corazón se abra sincero,
y en su misma palabra este el consuelo,
dándole el perdón al traicionero.
El cielo azul ya es nuestro
si aprendéis a despojarte de lo que ata
más la ambición es la que mata,
privándonos de tan bello encuentro.
Sólo el poeta, sabe dar amor a manos llenas,
viviendo en soledad, va muriendo de penas,
dejando su verdad y la sangre en poemas.
desnudo llega al cielo, entre las almas.
Alicia M Moreno
10/04/2014
Derechos
Reservados
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