La cuna
Quedó un sueño en la almohada
tan pequeña como la cuna,
volaba junto al ángel un hada,
mar de amor entre los ojos y la pestaña.
Ternura infinita, corazón de miel
boca rosa bautizada por Dios,
sonrisa inocente amor fiel,
canción de cuna allá tan lejos.
Quién cantará al niño ahora,
cerró sus ojitos, sueña con la libertad,
lo sorprendió la aurora,
abrazado al mar, muy lejos de la felicidad.
Hay una cuna vacía, tantas,
avecillas inocentes sin alas
detuvo la guerra tu vuelo,
ya no hay consuelo,
que pueda detener las lágrimas.
Se escuchará una voz en el mar
cantando una nana,
quizás alguien que sepa amar,
entenderá el canto cargado de pena.
La nana para el ángel
que se llevó la mar,
sepultó la arena,
sus sueños blancos.
¡Silencio! vacía está la cuna
y la guerra no termina.
y el dolor crece y crece.
Alicia M Moreno
03/09/2015
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Joooeeerr qué penaa dioss. Precioso poema.
ResponderBorrarGracias querido Javier, ojalá se termine la guerra y no tengamos que ver más estas cosas
ResponderBorrarte juro hace días tengo el corazón destrozado..gracias por dejar tu palabra..te dejo un abrazo...