jueves, 28 de enero de 2016

Una cita a ciegas...

Una cita a ciegas…
A mi hija Cristina…

Y sí, fue un milagro
tomé entre mis manos el papel,
yo, temblaba ilusionada mientras leía,
habría en un tiempo casi exacto;
una cita a ciegas.
Comencé a imaginarte,
a sentir que mi piel rozaba tu piel,
que tu mirada, sería esa que yo amaría,
para toda la vida y más,
imaginé tus manos tomadas a las mías,
tu corazón latiendo con el mío.
¡Tanto ansié e imaginé ese encuentro!
La espera fueron horas llenas de deseos,
de amor intenso que crecía día a día.
Dios, cómo deseaba tenerte entre mis brazos,
besarte hasta calmar mis ansías y llorar de felicidad
de tanto y tanto amarte.
Al fin llegó el día y te vi tal cual te imaginaba
llegaste a la cita hija de mi alma.

Alicia M Moreno
Derechos Reservados
05/01/2016

No hay comentarios.:

Publicar un comentario