Fresa madura
Eres la fresa madura
que en mi boca se dilata,
como tu lengua fresca y pura,
llegando a la garganta.
Que sin mediar palabras,
nuestras lenguas se
entrelazan,
y me vas pidiendo más,
tus suaves brazos me
abrazan,
se aprieta mi cuerpo en
tus dunas.
lleno de locura para
amarnos.
Haciendo arder mí sangre
que fluye caudalosa en las venas,
un río ardiente que recorre,
mi cuerpo afiebrado y me llevas,
cual torrente lujurioso.
Eres
brasa que enciende mi llama
clavas tus uñas en mi
espalda,
y ardiente la sangre brota y clama,
dolor de amor, pasión esperada,
desnuda en mi lecho,
eres mi fresa madura que
muerdo con deseo.
Soy la fresa que muerdes con deseo
en mis orillas temblorosas.
Son tus ojos la fuente donde veo,
el manantial dulce de tus olas,
que fluyen tibias en níveo,
deslizándose en mis playas.
Eres la fresa, que muerdo y disfruto,
y cuando llego a tu
orilla,
mirándote a los ojos,
mientras nuestras piernas
se entrelazan,
y moviéndome dentro de
ti,
como se mueven las olas,
bañándote de espuma
Hazme llegar al horizonte
donde amarres tu barca,
y siga
deseándote,
embebida en tu espuma blanca,
cristalino torrente,
donde serenas tus ansias.
Llegaremos a ese
horizonte,
llego dentro de ti, para
que me sientas,
dentro de tu ser,
y los dos, fundidos los
cuerpos
un solo gemido,
un movimiento unísono,
y la locura del orgasmo..
Jesús Ignacio Páez… Venezuela
Alicia M. Moreno…Argentina
Derechos Reservados
04/01/2014
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